El proyecto se sitúa en una plataforma sobre el mar a la que se accede desde el espigón de la Marina de Valencia y alberga espacios centrados en la utilización de agua salada entre otros elementos marinos con fin terapéutico.
El centro de talasoterapia esta ubicado teniendo en cuenta el creciente desarrollo de la zona portuaria y su interés turístico. La relación de la terapia con lo marino convierte el mar mediterráneo en el lugar perfecto para el desarrollo del proyecto.
Pensado con el fin de acoger a cuantos precisen del tratamiento y/o disfrute de sus instalaciones, el programa está dividido en dos partes claramente diferenciadas no solo por la función que se les otorga sino también por su morfología.
La zona de las piscinas aporta carácter al conjunto. Esta presenta una forma orgánica y consonante haciendo un guiño a la vida que gira en torno al mar. Es el resultado de la observación de distintos cuerpos fusionándose en un mismo espacio. Aloja todo el sistema de duchas y piscinas climatizadas destinadas a la talasoterapia.
Por otro lado, el espacio que recoge los usos y servicios previos al acceso a las piscinas sigue un esquema lineal y eminentemente funcional. Dicho espacio reúne el área de recepción, vestuarios y diversas salas de masajes.
Lineal y orgánico, dos conceptos aparentemente discordantes. Sin embargo, la unión de ambas estructuras que conforma la totalidad del proyecto da lugar a un conjunto estructural que reúne características de belleza y eficacia.
